Señales pueden indicar que existe un problema visual en los niños

12 Mayo 2022

Los humanos no nacemos con un sistema visual completamente desarrollado y maduro, a pesar de tener todas las estructuras oculares completas. Las habilidades visuales se adquieren y perfeccionan cuando la corteza cerebral recibe una estimulación adecuada, y más o menos simétrica, de ambos ojos durante los primeros años de vida.

La visión mejora desde el primer mes de vida y solo mejora alrededor del 50% a los 3 años. Después de 5 años, será más o menos el 100%.

Por este motivo, los primeros años de vida –hasta los 7 u 8 años– son críticos para lograr un correcto desarrollo visual, ya que lograr un adecuado desarrollo visual luego de esta etapa se hace más difícil debido a la reducida plasticidad cerebral.

El diagnóstico precoz de anomalías que puedan impedir el desarrollo visual normal es fundamental en esta etapa de la vida porque, si no se detectan, pueden dejar secuelas irreversibles de por vida, y dar lugar a un bajo rendimiento académico. Para diagnosticar estos problemas oculares en los niños, los padres deben ser conscientes de la necesidad de realizar una serie de pruebas con un médico especialista en oftalmología pediátrica.

Hay una variedad de síntomas o signos que nos indican que un niño tiene la probabilidad de padecer un problema visual:

• si el niño parpadea o se frota los ojos;
• si guiña los ojos o frunce el ceño para ver mejor;
• si adquiere una mala postura al sentarse;
• si desvía un ojo de manera constante o cuando se cansa;
• si cierra o se tapa un ojo cuando lee o mira la pizarra;
• si padece tortícolis, especialmente cuando realiza tareas de cerca o de lejos;
• si se choca con los objetos;
• si tiene problemas de equilibrio.